4 mayo, 2020
El cierre de los restaurantes tiene consecuencias negativas más allá de las que afectan a los dueños de los establecimientos y a sus trabajadores y es que hay alimentos y bebidas cuya venta depende de forma directa de la hostelería. Este es el caso del cordero, con unas cifras que han bajado hasta mínimos históricos y cuyo consumo pretende fomentar la plataforma Teruel Existe, que cuenta con representación en el Congreso y en el Senado, con una campaña en redes sociales.
El diputado de Teruel Existe en el Congreso, Tomás Guitarte, ha solicitado al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que añada a las ayudas económicas directas otras para facilitar la exportación y para desarrollar campañas promocionales.
«Las ayudas anunciadas serán insuficientes si no se recupera el nivel de las ventas en España y si no crece la exportación. Es necesario realizar campañas de publicidad que informen de la necesidad de consumir carne de ovino», expone Teruel Existe sobre su iniciativa y sobre las demandas de los ganaderos de ovino.
El elemento principal de la campaña es un vídeo en el que, entre otras imágenes, aparece una pastora aragonesa, Ana Pilar Ramos, que apela a los sentimientos de los internautas para invitarles a comer cordero. «Yo me encargo de que no os falte esto en vuestras casas. Simplemente os pido que nos ayudéis para poder tener un futuro digno», explica la pastora, que recuerda las donaciones de cordero que ella misma realizó a varias residencias de ancianos.
La carne de cordero se suma a la lista de alimentos damnificados por el coronavirus y por el cierre de bares y restaurantes. Los productores de cerveza y los responsables de las bodegas de vino también alertaron de las terribles consecuencias económicas que tendrían sobre su sector las restricciones impuestas a la hostelería debido a la pandemia.