25 septiembre, 2023
La construcción del primer hotel espacial podría ser una realidad para 2027. Así lo afirma Tim Alatorre, arquitecto y director de Operaciones de la empresa Above Space. «Estamos desarrollando estaciones espaciales de gravedad artificial. La gravedad en el espacio alivia las graves afecciones médicas debidas a la ingravidez, lo que permite un entorno que favorece una mayor accesibilidad para el turismo», afirma el directivo.
El nuevo hotel espacial recibirá el nombre de Estación Pioneer y en un principio esta pensada para albergar 24 huéspedes más los cuatro tripulantes de la nave. La idea es ir ampliando el complejo para que pueda albergar espacios de ocio. Esto supondría aumentar hasta los 10 o 15 días la estancia en este complejo y la capacidad para albergar 400 turistas.
La Estación Pioneer también está preparada para que los primeros visitantes participen en las investigaciones científicas
El proyecto se presentará en la Cumbre Universal de Turismo Espacial y Submarino (SUTUS por sus siglas en inglés) que tendrá lugar en Marbella del 26 al 28 de septiembre. La Estación Pioneer también está preparada para que los primeros visitantes participen en las investigaciones científicas además de poder observar la tierra.
Por ahora, el turismo espacial solo está al alcance de unos pocos. De hecho, se cree que la estancia en la Estación Pioneer no cueste menos de 10.000 euros. Democratizar el acceso a este tipo de viajes es uno de los retos que afronta el sector. La reducción de costes es una constante que se lleva observando en la industria aeroespacial desde mediados del siglo pasado. En aquel entonces, mandar un kilogramo al espacio exterior costaba 8.000 euros. Actualmente, el precio de mandar una cantidad semejante de materia ronda los 3.500 euros. Todo ello gracias a la aparición de cohetes reutilizables y al esfuerzo conjunto de empresas públicas y privadas para abaratar costes.
Una tendencia que muestra el gran camino que se ha recorrido ya. Hay que tener en mente que el primer turista espacial de la historia, Denis Tito, pagó nada menos que 20 millones de dólares en 2011 por unas vacaciones de una semana en la Estación Espacial Internacional.