27 diciembre, 2017
Representáis a unos 7.000 profesionales con necesidades muy diferentes, no debe ser fácil gestionarlos, ¿cómo se consigue? La verdad es que es muy difícil porque el sector está muy atomizado, hay mucho pequeño empresario, mucho autónomo, mucha pyme y empresa familiar. Y cada comarca o geodestino tiene problemas diferentes. Influye muchísimo la capacidad que tiene el propio asociado a la hora de buscar sinergias. Lo que tratamos es que el nombre de Galicia esté siempre presente sin localismos para traer más visitantes, para tener los índices de calidad que tenemos y, sobre todo, para intentar conseguir que venga más gente.
¿Cómo ha ido 2017? Muy satisfactorio. Las previsiones que teníamos tanto de realización de proyectos como de asistencia a ferias y de búsqueda de sinergias de empresas dentro del Clúster… la verdad es que hemos conseguido lo que nos habíamos propuesto.
¿Qué objetivos os habéis marcado para este año que empezamos? Pues va a ser un año de transición porque tocan elecciones, después de cuatro años tenemos que convocarlas. Intentaremos que sea a partir de Fitur. Pero sin lugar a dudas 2018 seguirá en la misma línea que 2017, las sensaciones que tenemos son buenas, en el sector hotelero incluso hay reservas para el año que entra. Hay establecimientos con un 30% y 40% de ocupación de cara a la campaña veraniega y todo parece indicar que las cifras de pernoctación van a ser iguales o un poco superiores a las de 2017. Es una alegría, pero nos preocupa mucho también la sostenibilidad de nuestros establecimientos y ofrecer el mejor trato que podamos dar.
¿Los hoteles tienen un futuro despejado a pesar de la competencia de los pisos turísticos? Bueno, son dos conceptos totalmente distintos. Había que regular una parte que no estaba regulada y de hecho unos 5.000 pisos o viviendas de uso turístico han salido a la luz y están reguladas por una normativa autonómica gallega. Eso era una necesidad. El sector hotelero puede competir con esto, no se riñe el uno con el otro. Lo que tenemos es que trabajar todos bajo unos parámetros de legislación. La competencia desleal no es buena. Pero el cliente, a la hora de escoger su establecimiento, sabe perfectamente a dónde va.
¿Crees que determinadas zonas han tocado techo y que cada vez más gente está volviendo los ojos hacia la España Verde? Desde luego que sí, estoy convencido de que el norte español tiene que seguir creciendo. La progresión que tenemos desde que salimos de la crisis hace tres años es pequeña, pero aumentando. Pero nos preocupa mucho aumentar los datos de pernoctación y el gasto medio del turista. Es bueno que pase más días, consuma más y que se de cuenta de que en Galicia hay una enorme variedad paisajística, y también la gastronomía -algo por lo que el turista viene- es muy distinta en la costa y el interior. Ese interior que queda por descubrir, hay multitud de formas de estar en Galicia.
¿Que conocimiento hay de Galicia fuera de ella, que percibís? Lo que conoce la gente es verde, paisaje, gastronomía y enoturismo y Calidade. Lo que tenemos es una marca potentísima que después de casi 25 años está en boca de todo el mundo. La marca está creada y la gente la reconoce. Eso lo percibimos constantemente. Ya que la tenemos debemos seguir apoyándola, es potencial turístico. Y no descuidar aquellas zonas que deben seguir siendo sostenibles, tenemos que gestionarlas y planificarlas para que no haya una avalancha de turistas.
«No podemos descuidar zonas que deben seguir siendo sostenibles, tenemos que gestionarlas y planificarlas para que no haya una avalancha de turistas».
Le dais mucha importancia a formar a la gente del sector. ¿Qué estáis recogiendo de los cursos que habéis organizado hasta ahora? Uno de lo objetivos principales del Clúster es la formación, año tras año aumentamos esta partida y este año ya ha habido el doble de participantes, casi 400. Lo que hacemos es una breve encuesta para preguntarles qué cursos tienen mayor interés y poder realizarlos, también hemos duplicado el numero de localidades donde se han impartido. Es primordial. Bien es cierto que ya están las segundas y terceras generaciones al mando de muchos establecimientos de hostelería, campings, restaurantes…. La formación de estas generaciones es mucho mayor que la de antaño, pero hay que incidir en ello para vender un destino de calidad: cuanta más formación más recorrido tenemos a la hora de incrementar precios, de ofrecer al turista una mayor relación calidad-precio y de aumentar las cifras de ocupación.