23 abril, 2019
Hasta tres nuevos operadores podrán competir con Renfe por el AVE a partir de diciembre de 2020, cuando el transporte de viajeros en tren se abra a la competencia, tal y como se incluye en el modelo de apertura de la red ferroviaria que ha diseñado Adif.
Esta semana, la compañía pública que gestiona las redes ferroviarias en España ha dado el pistoletazo de salida oficial para el anunciado proeso de liberalización remitiendo a las empresas interesadas y a órgano regulador del mercado, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia el borrador de la Declaración de Red, lo que equivale al documento que incluye la información detallada sobre la red ferroviaria y su capacidad para que los operadores puedan solicitar los «surcos» o «slots» que les interesen.
Adif ha fijado como fecha tope para las solicitudes de las empresas el mes de julio de 2019.
Hasta este momento han sido dos las empresas que han mostrado su interés en entrar en el mercado ferroviario español: Acciona y la operadora ferroviaria francesa SNCF. Todos los datos apuntan a que, además, ambas empresas están negociando la posibilidad de aliarse para presentar una oferta conjunta.
Tres ejes diferentes de AVE
El diseño de Adif, sin embargo, contempla la posibilidad de que sean tres las empresas que entren en el mercado y para ello ha diseñado tres tipos de servicios diferentes, con diferentes frecuencias diarias de trenes en tres ejes.
El primer eje sería Madrid-Barcelona-Frontera francesa; el segundo Valencia-Alicante y el tercero se centraría en la zona sur enlazando Madrid con Toledo, Sevilla y Málaga.
Las empresas podrán negociar acuerdos a 10 años con Adif para facilitar las importantes inversiones económicas que pueden venir asociadas a la gestión de las líneas férreas.
El principal criterio que manejará Adif será el de el mayor aprovechamiento y uso de la red, de forma que no dará entrada a operadores que pidan una circulación que no alcance, al menos el 65% de las circulaciones ofertadas.
Amortizar deudas
Otro de los objetivos que persigue Adif es, claramente, el económico, para lo que cuenta con el pago del canon que tendrán que efectuar cada compañía por el uso de las vías y estaciones. De esta forma tratará de atajar su deuda de más de 15.000 millones de euros.
En diciembre de 2019, un año antes de que la liberalización entre en vigor, las compañías tendrán que disponer de la información de la capacidad con la que cuentan para entrar en el ámbito del transporte de viajeros por tren en España.