20 marzo, 2019
El Brexit sigue estando en el centro del debate del sector turístico, que mira con preocupación aspectos como las trabas para los viajeros o la situación de los trabajadores comunitarios que se encuentran desempeñando su labor profesional en el Reino Unido.
La incertidumbre generada en torno a la salida de Reino Unido de la Unión Europea fue también el tema principal del encuentro entre el embajador británico en España, Simon Manley el Consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer. La reunión se celebró en la sede de Meliá Hotels International, en Palma de Mallorca, y también estuvo presente el Cónsul General Lloyd Milen.
Durante el encuentro ambas partes reconocieron la importancia de plantear a las autoridades británicas una postura conjunta a través de foros empresariales, como la Cámara de Comercio de España en el Reino Unido. Además, Manley destacó la voluntad del Gobierno de «normalizar» la situación para que el país británico siga atrayendo talento «sin distinción de su nacionalidad». También animó a las compañías españolas a «informar adecuadamente» a los trabajadores que se encuentran en Reino Unido, donde la cadena Meliá cuenta ya con cuatro hoteles a los que se sumarán otros dos el próximo año.
Otro asunto relacionado con el Brexit y que también preocupa tanto a los representantes del sector turístico como a los del país británico está relacionado con los posibles retrasos y colapsos en aduanas o problemas derivados de los visados. Aunque se trata de un conflicto que ya están tratando de evitar los gobiernos de ambos países.
Al margen de la incertidumbre generada en torno al Brexit, la cita también sirvió para abordar otras cuestiones como el modelo turístico de Magaluf (Mallorca), en el que la cadena hotelera ha invertido más de 250 millones de euros en los últimos años y en que el pueblo británico representa más del 47% del turismo total.