9 febrero, 2018
El Ministerio de Interior empezará a cruzar datos de los viajeros con los registros de la Policía para tratar de localizar a posibles yihaidistas. El PNR (Registro de Nombres de Pasajeros), una de las herramientas más polémicas contra el terrorismo, está lista para comenzar a funcionar en España.
La medida, que lleva tiempo trabajándose desde Interior, cruzará tres millones de datos de pasajeros diarios con las bases policiales del CITCO (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), donde se ubicará la ONIP (Oficina Nacional de Información de Pasajeros). Allí se almacenarán y tranferirán los datos personales de los viajeros enviados por las compañías aéreas. El sistema lo auditará la Agencia de Protección de Datos.
La polémica está servida ante una medida muy debatida ya que se manejan datos personales muy delicados como el nombre, teléfono, correo, datos de pago e itinerario de viaje completo, frecuencia con la que viaja, tipo de equipaje entre otros. Se trataría de una radiografía muy completa de todos los viajeros españoles. De ahí la importancia crucial del papel de la Agencia de Protección de Datos en el manejo de los mismos.
Más de mil compañías aéreas enviarán todos esos datos a la nueva Oficina Nacional de Información de Pasajeros (ONIP), de reciente creación e instalada en el CITCO. Allí serán procesados, tratados y transferidos por un costoso sistema informático y permanecerán activos durante seis meses, tras ese período pasarán a ser opacos y serán destruidos en un plazo de cinco años.
Una normativa europea aprobada en abril de 2016 regula este proceso que entrará en funcionamiento, previsiblemente, en los próximos meses, en 14 países europeos.
Está previsto que el Consejo de Ministros apruebe antes del 25 de mayo (fecha límite para la puesta en funcionamiento de los ficheros) la ley orgánica que regula este nuevo fichero y su uso. La Policía podría aprovechar estos datos en investigaciones relativas a terrorismo, crimen organizado, explotación sexual, corrupción, tráfico de armas, secuestro, violación, ciberdelincuencia hasta un total de 26 tipologías diferentes de delitos que se recogen en la directiva europea.
Según informa el diario El País, la normativa podría ampliarse a los pasajeros de barco y tren en un futuro, ya que la directiva europea también contempla esa posibilidad.