8 marzo, 2019
Cabify ha reiniciado su actividad en la ciudad condal este jueves 7 de marzo, tras conseguir sortear el requisito impuesto por el Govern de Cataluña y por el que tuvo que dejar de operar en Barcelona
a principios de año, al igual que ocurrió con Uber.
La vuelta se debe a que ha conseguido evitar una de las condiciones que se le habían impuesto: la obligación de solicitar un vehículo de este tipo con 15 minutos de antelación y al mismo tiempo, ha sido capaz de adaptar su servicio. En este sentido, la medida que ha tomado en Barcelona consiste en pasar a operar directamente ‘Vehículos de Alquiler con Conductor (VTC), en vez de actuar como intermediario como hacía hasta el momento.
En cuanto a la obligación de contratar el servicio con 15 minutos de antelación, Cabify ha conseguido que solo se aplique cuando el usuario se descargue la aplicación y no cada vez que el usuario ‘pida un Cabify’, un gesto que se considera “una petición” y no “una contratación”.
La compañía insiste en que mantendrá los precios, a pesar de los cambios a los que ha tenido que someterse para seguir operando en la ciudad condal.