5 diciembre, 2019
PABLO LÓPEZ /
Los hoteles más próximos a las estaciones de esquí ubicadas en la provincia de Huesca han registrado, para esta temporada de invierno, un repunte en las reservas con respecto a la pasada. Así lo afirma un estudio del portal Rumbo.es, que destaca que los alojamientos cercanos a Formigal y Canfranc han duplicado sus registros de hace un año y que los que dan servicio a quienes acuden a Cerler han experimentado «un despunte importante».
«El Pirineo Aragonés es uno de los secretos mejor guardados. En Huesca pueden encontrarse espacios insólitos», explica el informe del portal de reservas, que incluye las estaciones oscenses en sus recomendaciones para los amantes de los deportes de invierno.
La adaptación de los espacios a todos los niveles, la presencia de profesionales que organizan excursiones guiadas y la celebración de fiestas en los días de mayor afluencia son tres de los atractivos de las estaciones de esquí oscenses que menciona Rumbo.es.
Las estaciones de esquí prevén que la llegada de visitantes se dispare esta temporada hasta máximos de los últimos nueve años. La Asociación Turística de Estaciones de Esquí y Montaña (Atudem) estima que seis millones de personas acudirán a esquiar a alguna de las estaciones españolas.
De esta forma, el sector consolidará la recuperación que inició tras el mal dato de la temporada 2015-16. Por aquel entonces, las temperaturas altas y las bajas precipitaciones retrasaron el inicio de temporada e impidieron que la nieve alcanzase una calidad óptima. Esta situación lastró la llegada de visitantes, que se desplomó hasta los 4,7 millones. Pero, desde entonces, el sector emprende una escalada que lo sitúa a las puertas de un récord histórico. La cifra repuntó hasta los 5,4 millones en la temporada 2016-17 y los 5,8 millones del año pasado, que el sector confía en superar este año.