18 marzo, 2019
Los problemas de tráfico aéreo que se han generado en Europa en los últimos tiempos necesitan una solución urgente. Por ello, está previsto que en este verano de 2019 el espacio aéreo español asuma entre 150 y 160 vuelos más en aras a aligerar parte del problema.
Se trata de «descongestionar las grandes demoras» que actualmente están centralizadas en Francia y Alemania, especialmente en los centros de control aéreo de Marsella y Karlsruhe, además de en Maastricht (Países Bajos).
«Si el año pasado fue malo, si no hacemos nada, este año va a ser en términos técnicos casi un colapso, por eso se ha decidido que alrededor de 1.000 vuelos que tendrían que sobrevolar el centro de Europa se sacarán de ese entorno», así lo han declarado fuentes de Enaire a la agencia Europa Press.
La solución pasaría por cambiar los planes de vuelo de una parte de esos aviones que circulan por las zonas más congestionadas. De este modo muchos vuelos tendrán una mayor duración pero, a cambio, saldrán y llegarán puntuales a su destino.
Para evitar el posible colapso se han realizado una serie de pruebas y ensayos que determinan que estos cambios en los planes de vuelo supondrán una prolongación de entre 5 y 10 minutos en la mayoría de recorridos, según informan desde Enaire.
Desde el proveedor de control aéreo afirman, del mismo modo, que estos cambios no afectarán a tierra, a los aeropuertos, aunque sí reconocen que quizás necesiten aplicar algún ajuste o «alguna regulación» en la operativa derivada de una mayor carga de trabajo ocasionada por estos vuelos.