16 julio, 2018
La Organización Mundial del Turismo (OMT) está elaborando su propia lista de recomendaciones ante la situación de saturación turística que se vive en el mundo en los últimos años. En concreto, se ha fijado en diversos casos europeos, en países considerados principales receptores de visitantes.
El secretario general de la OMT, Zurab Pololikachvili, en una entrevista publicada por la revista Savia, editada por Amadeus España, afirmaba que «hay ciudades que no quieren más turistas, pero también hay otras que quieren atraer más turismo. Hay que buscar el equilibrio».
Este informe, que verá la luz en noviembre según las previsiones de la organización, se empezó a gestar ya en el año 2017, con motivo de la cumbre ministerial de la OMT en la World Traveler Market en Londres. Allí ya se puso de manifiesto la creciente necesidad de una planificación adecuada y una diversificación de productos como dos de los aspectos principales que debían ser tratados en los años siguientes.
Gestión de los nuevos flujos de turismo
El crecimiento del sector en los últimos años ha sido exponencial, superando los 1.300 millones en todo el mundo en 2017. Ante esta demanda creciente, la OMT ve fundamental mantener el equilibrio entre el crecimiento, el cuidado de la naturaleza y el mantenimiento de la sostenibilidad.
Este crecimiento se vive, además, en un contexto mundial en el que surgen continuamente nuevas plataformas de servicios turísticos que conviven también con la conocida como economía colaborativa (apartamentos vacacionales alquilados por particulares, intercambio de apartamentos, etc…) Sobre todos estos nuevos fenómenos, el secretario de la OMT señaló que «son modelos de negocio nuevo que nadie puede parar, pero sí se pueden regular».
Pololikashvili ha señalado que España se enfrenta al reto de ser «un ejemplo turístico para otros países». «Es un país que cuenta con casi todo lo que necesita un turista», ha indicado, al tiempo que ha señalado como ventaja también el alto grado de fidelización con que cuenta. En el extremo opuesto de la balanza se encuentra, indica la OMT, la necesidad de superar el reto de gestión que supone la llegada de 80 millones de visitantes al año, y, sobre todo, de diversificación de la riqueza que genera el sector.