14 julio, 2019
PABLO LÓPEZ /
La Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) reclama que el Gobierno y las administraciones autonómicas y locales emprendan medidas contra la «explosión descontrolada de pisos turísticos», un problema que la organización utiliza como ejemplo para alertar acerca del surgimiento de «escenarios de saturación».
Exceltur, en su decálogo de buenas prácticas que deben aplicarse para mejorar el turismo en España, reclama «nuevas políticas que faciliten modelos de crecimiento más sostenibles» y «un mayor rigor» en el control de la masificación «que afecta a la calidad de vida ciudadana, a la satisfacción del turista y a la reputación del sector».
Exceltur alude a los pisos turísticos que incumplen la legalidad o que no están registrados como tales, que perjudican al negocio, no solo propiciando el crecimiento descontrolado, sino también compitiendo de forma desigual contra los alojamientos que sí cumplen los requisitos que marca la legislación. La organización considera necesarias actuaciones que permitan acabar con «la competencia desleal entre actores no reglados y reglados».
La lista de peticiones de Exceltur a los gobernantes incluye el establecimiento de un nuevo sistema nacional de indicadores y estadísticas y que la información recogida vaya más allá de la cifra de visitantes. Así, demanda datos «más fiables, desagregados y comparables a nivel regional y municipal».
«Las estadísticas deben facilitar una mejor toma de decisiones, que permita anticipar y valorar la evolución turística y sus impactos socioeconómicos», expone Exceltur en un comunicado en el que alerta de la desaceleración del sector turístico en España.
Para controlar el turismo de una forma más eficiente, Exceltur sugiere que los ayuntamientos inicien un proceso de «digitalización» que les permita identificar de forma precisa las características de los visitantes que reciben y compararlas con el modelo de turista que desean.
Exceltur realiza estas propuestas como posibles soluciones a un escenario de desaceleración en el que, si bien los empleos vinculados al turismo crecieron un 3,7% durante el segundo trimestre del año, el sector creció a menor ritmo que en el primero (un 1,7% frente a un 2,3%).