12 marzo, 2021
El empresario coruñés Álvaro Rodríguez Argüelles, socio de la aplicación sobre bares Tappear y de la coctelería La Parda, reconoce que, hace un año, todavía no era consciente de lo grave que resultaría la pandemia para el conjunto de la sociedad y, en especial, para los negocios de hostelería. Pese a todo, ve el futuro con optimismo y espera que la población mantenga intactas las ganas de disfrutar de sus locales preferidos y que lleguen ayudas para reflotar los negocios.
-¿Cómo recuerda el día en que se decretó el confinamiento?
-Creo que ninguno éramos conscientes de lo que se nos venía encima. Entendí que se trataba de una medida extrema para volver lo antes posible a la normalidad. No me había planteado que iba a cerrar todo durante tanto tiempo.
-¿Cómo ve la situación un año después?
-Pues parece que ya sólo vamos a ir a mejor y yo tengo esperanza en que, efectivamente, cada vez sean más laxas las medidas y en que la gente saldrá a consumir como loca. Espero que lleguen ayudas y que la administración sea más permisiva con la hostelería durante un tiempo (terrazas más amplias, horarios más flexibles…).