11 enero, 2021
El sector del caravaning soportó mejor que otros el golpe que supuso la pandemia y terminó 2020 con 8.690 matriculaciones, cifra cercana a la de 9.014 registrada en 2019. Este éxito relativo, sin embargo, conlleva riesgos. La Asociación Española de la Industria y el Comercio del Caravaning (Aseicar) celebra los datos del año recién finalizado, pero advierte de los peligros asociados a la importación de vehículos sin homologar y al alquiler entre particulares.
«De las 8.690 matriculaciones de autocaravanas y campers en nuestro país, 2.552, casi un 30%, tienen matriculación europea anterior, lo que supone un riesgo en materia de contaminación, homologación e incluso de documentación alterada», explican desde Aseicar acerca de las importaciones.
Sobre los alquileres entre particulares, los empresarios del caravaning recuerdan que «una autocaravana para uso particular no puede destinarse bajo ningún concepto al alquiler» y advierten de que los vehículos que se arrendan en estas transacciones carecen de certificaciones acerca de su estado real.
El presidente de Aseicar, José Manuel Jurado, manifestó su satisfacción por los resultados alcanzados en 2020 y recalcó la importancia que, en un año tan complicado como el pasado, tuvo el escrupuloso cumplimiento de los protocolos sanitarios por parte de los negocios.
«Estos datos son muy positivos teniendo en cuenta el año tan difícil que hemos vivido, con altibajos, miedo e incertidumbres. Nos permiten respirar a la espera de lo que ocurra económicamente en los próximos meses. Para lograr este resultado, han sido cruciales el trabajo y el esfuerzo de nuestros asociados, que se adaptaron a las circunstancias de cada momento con un cumplimiento absoluto del protocolo sanitario», declara Jurado.