31 agosto, 2020
La Confederación de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) apuesta por la realización de pruebas y test a los turistas que llegan a España. «Si la Unión Europea no se hace cargo de forma obligatoria de los test a la salida de los países, debemos ser nosotros los que los establezcamos a la llegada», indican desde la patronal. En este sentido piden que los que lleguen a España y no presenten un PCR realizado en un máximo de 48 horas antes del viaje, se sometan a un test a su llegada al primer aeropuerto español. Una prueba que, según los hoteleros, lo puedan financiar entre los alojamientos y los turistas.
Los hoteleros han trasladado esta propuesta a la ministra de Turismo, Reyes Maroto, a través de una carta en la que le han pedido que se cree una comisión interministerial en la que estén presentes los responsables de las diferentes comunidades autónomas para abordar todos los problemas que afectan al sector y la necesidad de poner en marcha un plan de choque que incluya medidas sanitarias, laborales y fiscales para asegurar la supervivencia del sector turístico español.
En el ámbito laboral, CEHAT insiste en la articulación de unos ERTE específicos para el sector hotelero que permitan la entrada y salida de trabajadores en función de la coyuntura turística y que cuenten con una exoneración total de la Seguridad Social de los que se quedan dentro del ERTE, no de los que salen, puesto que, si un empresario saca a un trabajador del ERTE se considera que lo hace porque está generando recursos para pagar su salario.
Por tanto, la ayuda debe ofrecerse a aquellos trabajadores que permanecen dentro del ERTE y dejar a responsabilidad del empresario asumir el coste de los trabajadores que se reincorporan a su actividad. Además, los hoteleros insisten en que estos nuevos ERTE deben estar activos, como mínimo, hasta la Semana Santa de 2021 con el fin de garantizar que las empresas tengan oxígeno para llegar hasta esa fecha y, con ellas, el empleo que generan.
Además, la patronal hotelera pide la exoneración de algunos impuestos que graven la actividad, tanto a nivel local como autonómico, para este ejercicio 2020, como es el caso del IBI, las tasas municipales o el IAE.