13 junio, 2019
Bodegas, territorios vitivinícolas y colectivos profesionales tienen una cita en el gran salón del vino de Valladolid. FINE, la Feria Internacional de Enoturismo, que abrirá sus puertas entre el 12 y el 13 de febrero con el objetivo de mejorar la proyección internacional y fomentar las relaciones comerciales.
El evento supone una oportunidad para las bodegas, denominaciones, rutas y las empresas que venden productos vinculados al enoturismo,ya que podrán generar contactos y acuerdos comerciales. Además, la dinámica de FINE contempla un área de exposición donde las bodegas tendrán la oportunidad de dar a conocer sus vinos a compradores nacionales e internacionales. Por otra parte, habrá dos áreas exclusivas para potenciar el ‘networking’.
Las rutas del vino recibieron en 3,2 millones de visitantes en 2018, lo que se tradujo en un impacto económico de 67 millones de euros. Estos datos de la Asociación Española de Ciudades del Vino demuestran el crecimiento del enoturismo, una modalidad que aúna patrimonio, cultura, vino, gastronomía y experiencias.
En España existen 28 rutas repartidas por once comunidades autónomas, de las que siete se encuentran en Castilla y León, cuatro en Aragón, tres en Andalucía y Murcia, dos en Cataluña, Comunidad Valenciana, País Vasco y La Rioja y una en Galicia, Extremadura y Navarra.
Los principales atractivos del enoturismo en España son las bodegas. Las que más visitantes recibieron durante el año 2018, con más de 500.000, son las que corresponden a las rutas del Vino y Brandy del Marco de Jerez y la del Vino y del Cava del Penedés, con 486.000 visitantes según los datos facilitados por los organizadores de FINE. Desde la Feria de Valladolid también apuntan que por detrás de estas zonas, aunque por encima de las 100.000 visitas, se encuentran otras denominaciones de origen españolas como Ribera del Duero, Empordà, Calatayud, Rioja Alta, Rioja Alavesa y Rías Baixas.