30 marzo, 2022
Se confirma lo que prácticamente todos los aficionados a los toros de Gijón temían: no habrá feria en la ciudad en los próximos años. Así lo ha confirmado el Ayuntamiento, que alude a los resultados de un informe que advierte de que la plaza de El Bibio no es segura. En concreto, el texto recoge que «el riesgo de hundimientos puede producir situaciones de pánico».
En una ciudad cuya alcaldesa ya había manifestado su deseo de acabar con los toros después de que en la última edición de la feria murieran sobre la arena astados con nombres como Feminista y Nigeriano, situación que indignó sobremanera a representantes de los colectivos feminista y animalista, este informa ha hecho saltar la polémica, máxime si se tiene en cuenta que contradice otro anterior que garantizaba que el recinto gijonés era completamente seguro.
El informe previo, al que se refirió Carlos Zúñiga Jr., cuya empresa Circuitos Taurinos tenía la concesión de la plaza, no sólo alude a la seguridad del recinto, sino que destaca la realización de obras para mejorarla hasta el punto de reducir al mínimo el riesgo de accidentes. «Se han añadido mejoras adicionales, especialmente en vomitorios, palcos y andanadas», recoge el documento.
«El riesgo de hundimiento puede producir situaciones de pánico», recoge el informe sobre la plaza de El Bibio en el que se basa el Ayuntamiento
El nuevo informe y la decisión que ha motivado no sorprenden a nadie, pues pocos aficionados gijoneses contaban con poder presenciar toros en su ciudad este año después de que la propia alcaldesa hubiera dejado caer que celebrar la feria pondría en peligro a muchos de sus conciudadanos.
«Será prácticamente imposible celebrar espectáculos allí por motivos de seguridad. Mientras yo sea alcaldesa, no voy a incurrir en ningún riesgo para las personas», había manifestado la regidora Ana González, que vuelve a hacer méritos para figurar en los primeros puestos de la lista de enemigos de la tauromaquia para muchos aficionados, empresarios, ganaderos y demás gentes del mundo del toro.
La parroquia taurina de Gijón sabe que no habrá toros este año, pero desconoce cuándo podrá volver a haberlos o, lo que es peor, si los volverá a haber algún día. La plaza de El Bibio se someterá a una remodelación para la que, previamente, hay que redactar un proyecto. Su consideración como Bien de Interés Cultural demorará aún más la realización de las tareas pertinentes para solucionar los supuestos fallos de seguridad a los que alude el Ayuntamiento.