Hasta 110 vuelos cancelados en la primera jornada de revueltas por la sentencia del ‘Procés’

MARÍA EIMIL / PABLO LÓPEZ /

La primera jornada de revueltas tras la sentencia del Procés ha dejado un saldo de 110 vuelos cancelados en el aeropuerto Barcelona-El Prat, así como importantes retenciones de tráfico en la ciudad y paralización del servicio ferroviario en algunas vías.

Miles de manifestantes tomaron la T1 del aeropuerto barcelonés, coreando consignas a favor de la independencia y en contra de la sentencia por sedición dictada contra los líderes políticos secesionistas. Las fuerzas de seguridad se vieron obligadas a intervenir aunque nada pudieron hacer para garantizar el normal funcionamiento de la terminal.

La colocación de barricadas en las vías del tren impidió la circulación de los trenes Barcelona-Girona y Figueres, servicios que siguen sin funcionar, mientras que el AVE Barcelona-Madrid ya circula con normalidad. Las manifestaciones también causaron retrasos y cancelaciones en los de cercanías, algunos de los cuales siguen teniendo problemas en la jornada de hoy.

Atención al turista

La preocupación por la crisis del transporte causada por las manifestaciones ha llevado a Turisme de Barcelona a habilitar una línea telefónica de atención a los afectados por las cancelaciones y retrasos.

La embajada de Estados Unidos, que ya había alertado a sus ciudadanos durante el verano acerca de la inseguridad en la ciudad de Barcelona, ha emitido un comunicado para alertarles de las protestas. Para evitar problemas, les aconseja que «mantengan un perfil bajo» y que eviten las zonas donde se concentran los manifestantes. También les sugiere que estén pendientes de las redes sociales de las fuerzas de seguridad.

El sector hotelero de Barcelona también ha expresado su preocupación. En declaraciones a TUR 43, el director general del Gremi d’Hotels de Barcelona, Manel Casals, reconoce estar inquieto por la imagen que Cataluña ofrece hacia el exterior. «Esperemos que las movilizaciones se minimicen y que cualquier acción que tenga que llegar ocurra en el Parlament y no en la calle», manifestó.