13 agosto, 2022
El alquiler de barcos se ha convertido en una de las opciones vacacionales que mayor crecimiento ha experimentado en los últimos años. La sensación de libertad, intimidad y contacto con la naturaleza ha hecho que muchas parejas, familias y grupos de amigos se decidan ‘embarcar’ en una aventura durante los últimos días de agosto.
Este crecimiento exponencial en el alquiler de barcos tiene un origen lógico durante los dos años de pandemia, donde la gran mayoría de opciones turísticas estaban limitadas y el aislamiento requería de actividades lúdicas que permitieran la desconexión con otros grupos de personas.
Sin embargo, el gran aumento de alquileres de barcos vacacionales no ha sido algo momentáneo. Según Click&Boat, una plataforma especializada en este sector (ellos mismos se denominan como el «Airbnb de los barcos»), en este primer semestre de 2022 recibieron cerca del triple de reservas en su plataforma en español que en el mismo periodo de 2019, antes de la pandemia.
La sensación de libertad, intimidad y contacto con la naturaleza ha hecho que muchas parejas, familias y grupos de amigos se decidan ‘embarcar’ en una aventura
La gran mayoría de reservas van acordes con una nueva tendencia turística con la que se busca recuperar el tiempo perdido y pasar las vacaciones en compañía de la familia que se elige: Friendcation –o lo que es lo mismo, “viajar entre amigos”. Por eso, los barcos más alquilados en la plataforma son aquellos que tienen espacio para grupos. Los veleros se postulan como el transporte y alojamiento ideal para pasar unos días en plena naturaleza, y las lanchas son ideales para los planes de último minuto.
¿Cuáles son los pros de alquilar un barco? Toma nota, porque puede que tu próxima escapada la hagas surcando los mares…
Pocas opciones vacacionales dan más libertad de movimiento que alquilar un barco. ¿Un consejo? Elegir un destino con diferentes puntos visitables mientras pilotamos un barco (islas, playas o incluso varios puertos). Si nos decidimos por el Mediterráneo, por ejemplo, podemos atracar un día en una cala de aguas cristalinas en la costa catalana y al día siguiente avistar un acantilado de las Baleares. Un barco es sinónimo de libertad y se puede alquilar prácticamente desde cualquier lugar.
Si estás buscando un plan alternativo al turismo urbano y cosmpolita, puede que tu destino se encuentre entre las olas. Además, viajar con tus amigos y amigas en plena naturaleza es un plan ideal para relajarse, ponerse al día y volver a conectar con amistades que no hemos podido ver en casi dos años.
Respirar aire fresco y contemplar paisajes imponentes es un plan envidiable al que pocos se pueden negar. Además, el mar es perfecto para practicar deportes y multitud de actividades acuáticas, como el snorkel o el buceo, que en grupo se disfrutan más aún si cabe.
No hay nada mejor que relajarse en medio del mar: nuestras conversaciones se perderán en la inmensidad del agua y nuestros planes quedarán entre los que ocupen el barco. Es como contar con una pequeña isla que garantiza intimidad y despreocupación para cualquier grupo de amigos. Y es que las confesiones de madrugada y el vestuario extravagante no suponen problema alguno desde la cubierta de un velero en altamar. En unas Friendcations a bordo todo queda entre el grupo de amigos, el barco y el mar.
Muchos grupos de amigos no han vuelto a tener una buena fiesta juntos desde la aparición del coronavirus en 2020. Son dos años de baile y anécdotas que hay que intentar recuperar y, sin duda, una boat-party puede ser la mejor manera de volver a los ruedos. Además, cualquier fiesta mejora con un buen chapuzón.
Música, bebida, comida y risas bajo el sol y con el mar de fondo. Eso sí, siempre respetando el entorno, la embarcación y a los otros navegantes. Pasarlo bien con amigos y la responsabilidad no son incompatibles.