21 diciembre, 2020
Cuando los españoles y, en general, los occidentales piensan en Japón, tienden a evocar las aglomeraciones de gente en el cruce de Shibuya de Tokio, a recordar las inconfundibles series de dibujos animados y cómics procedentes del país nipón y a imaginarse una sociedad a la vanguardia en el uso de nuevas tecnologías. Sin embargo, es posible encontrar parajes que se alejan de ese estereotipo. Uno de esos lugares, la aldea de Ogimachi en la localidad de Shirakawa-go, es el elegido por la Oficina Nacional de Turismo de Japón en España para atraer a los españoles de cara al futuro año.
A los pies del monte Hakusan, en la prefectura de Gifu, se ubica esta aldea, que cuenta con muchos de los elementos de los poblados navideños. Campos y construcciones cubiertas de nieve, casas iluminadas que llevan en pie desde hace más de dos siglos, familias que se dedican a oficios tradicionales desde hace generaciones y un aire puro convierten a la localidad en un lugar especial que invita a la reflexión y a la paz.
La oficina de turismo japonesa pone a la aldea como ejemplo de sostenibilidad, pues el buen estado de conservación de las estructuras y de la naturaleza que las rodea tienen su origen en el gran esfuerzo de la población local, que cumple a rajatabla las directrices basadas en un plan del año 1971 que se resumen en tres frases: No vender, No poner en alquiler y No destruir.
A los valores paisajísticos de Shirakawa-go se suma el atractivo que supone conocer la cultura japonesa profunda, que se ha mantenido intacta a lo largo de los siglos. Muchas de las casas de la localidad albergan museos, como la Casa Museo de la Seda de Tajima, que permite que el visitante se acerque a una de las más importantes industrias locales. Disfrutar de las vistas desde el mirador de Shirayama y degustar el doburoku, una bebida sin filtrar pareceida al sake, son otras de las experiencias imprescindibles en este destino.
Cada vez son más los españoles que viajan a Japón. En 2019 visitaron el país 130.243 españoles, una cifra que supera en un 9,5% a la del año anterior. Además, el país nipón tuvo una incidencia del coronavirus muy por debajo de la de otros pues, con una población de más de 126 millones de habitantes, sólo ha registrado 200.361 contagios y 2.816 fallecidos. España, con 46,94 millones de habitantes, registra ya 1.797.236 contagios y 48.926 muertes.