15 septiembre, 2021
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) advierte de que la temporada de otoño e invierno será «muy larga y muy dura» para el sector alojativo y demandan al Gobierno la prórroga de los ERTE en idénticas condiciones que las actuales con vistas a proteger a trabajadores y empresarios.
La patronal hotelera expone que los datos de julio y agosto, sobre todo en la península, apuntan a que el sector no tardará mucho en recuperarse si las condiciones sanitarias mejoran y, con ello, la demanda. Sin embargo, recalcan que la pandemia todavía no ha finalizado y que los buenos datos del verano, que siguen pese a todo muy lejos de los de antes de la Covid-19, no se reproducirán en temporada baja.
«Tras el espejismo de la época estival, se avecina una temporada de otoño-invierno muy complicada y en la que muchos establecimientos están volviendo a cerrar por falta de turistas», apunta Cehat en un comunicado en el que advierte de que medidas como la de los ERTE son ahora «más necesarias que nunca» para el sector alojativo.
La ausencia de la recuperación de la demanda de turismo extranjero en los destinos urbanos, las restricciones sanitarias de eventos y congresos, la falta de conectividad de aeropuertos secundarios, la bajada de actividad en la turoperación extranjera y el cambio en la movilidad del turismo de negocios son algunas de las causas por las que, siempre según las previsiones de Cehat, habrá en otoño un exceso de oferta de alojamientos que llevará a muchos hoteles a verse obligados a cerrar de nuevo.
«Necesitamos que se prorroguen los ERTE manteniendo las condiciones actuales y que se priorice al sector turístico, que es el que se ha mostrado más vulnerable y el que más ha sufrido durante la pandemia. Recordemos que venimos de un año y medio de tener los complejos prácticamente cerrados y la reactivación para las empresas es muy delicada», explica el presidente de Cehat, Jorge Marichal, que añade que «ahora empezamos a notar el abandono de la actividad turística nacional», una circunstancia que «se suma al desplome del turismo internacional» y que «es algo muy duro para las empresas que abrieron y habían visto una cierta recuperación en el mes de agosto».