21 junio, 2021
El Camino de Santiago a vela ya tiene su sexta Compostela. La plaza del Obradoiro de Santiago fue testigo, una vez más, de la foto del grupo de los peregrinos y, sobre todo, peregrinas del mar que este año, en su edición más femenina, han vivido la experiencia de compartir esta ruta turística xacobea tan particular.
Además de promocionar el turismo náutico, esta edición de Navega el Camino ha servido para que las mujeres que participaron mostraran a la sociedad, a través de sus vivencias, que las profesiones relacionadas con el mar pueden ser una fuente de inspiración laboral. Todas ellas, más de 60 peregrinas que subieron a bordo o bajaron en las diferentes etapas, disfrutaron de la navegación de recreo como experiencia personal y compartida, siempre bajo la tutela de una capitana experimentada que no dudó en poner sus conocimientos y su tiempo al servicio de esta iniciativa: la campeona olímpica asturiana Ángela Pumariega.
Durante la singladura por el embravecido litoral del norte de España hubo momentos que requirieron de un manejo del timón como el que mostró Pumariega, que supo sobreponerse a todos los peligros con destreza y siempre con la ayuda de toda su tripulación, una gran familia marinera.
En esta experiencia también hubo momentos de calma e introspección, como los que brinda el Camino de Santiago en todas sus modalidades y los que surgen de la contemplación de la belleza de las costas de Euskadi, Cantabria, Asturias y Galicia.
La de este año fue, para el Camino de Santiago a vela, una edición de avance hacia la consolidación de la experiencia, que ha sumado los mayores apoyos institucionales y de empresas privadas de toda su trayectoria. Al agradecimiento a las empresas colaboradoras, la organización suma el que merecen todos los puertos que han albergado a los barcos, los ayuntamientos de las localidades que han acogido a los peregrinos y los establecimientos que han mostrado su oferta turística, cultural y gastronómica.