24 mayo, 2022
Los Mossos d’Esquadra advierten a los turistas de que la ciudad de Barcelona registrará una oleada de robos durante la temporada de verano y es que los últimos datos de delincuencia registrados en la capital catalana y sucesos mediáticos como el robo sufrido el pasado fin de semana por el piloto de Fórmula 1 Sebastian Vettel en pleno centro de la ciudad apuntan en esa dirección.
Si Barcelona acabó 2021 con un incremento de un 6,6% de la tasa de delincuencia con respecto al año anterior, lo que las fuerzas de seguridad esperan para este 2022 será todavía más alarmante y no sólo por los robos, que afectan mayoritariamente a los turistas, sino también por otros delitos, como las agresiones sexuales.
El incremento del número de turistas que llegarán a la capital catalana este verano, una vez superadas las restricciones de la pandemia, tendrá una incidencia directa sobre la tasa de robos
A otros factores que, de forma más o menos clara y en función de la procedencia de las opiniones al respecto, influyen en ese aumento de la delincuencia, sí parece claro que el incremento del número de turistas que llegarán este verano a Barcelona, una vez finalizadas todas las restricciones de la pandemia, tendrá un efecto directo sobre la tasa de robos, pues son los visitantes que llegan a la ciudad los que más posibilidades tienen de sufrir algún tipo de robo.
Ya en Semana Santa, época en la que quedaron claras las ganas que tenían los ciudadanos de viajar tras la pandemia, se duplicaron los robos con fuerza y violencia en la capital catalana. Ahora, los Mosos d’Esquadra no dudan en calificar lo que se esperan para el período estival como «una bomba».
La disputa del Gran Premio de España en el circuito catalán de Montmeló es un gran escaparate para Barcelona y para Cataluña, si bien este año lo ha sido por un motivo que nadie buscaba. A los robos de los que fueron víctimas algunos de los que asistieron al evento como público e incluso las propias escuderías se sumó uno más mediático: el que sufrió el piloto Sebastian Vettel.
Los ladrones se llevaron una mochila de Vettel cuando éste se bajaba del vehículo con el que circulaba por las calles de Barcelona y el piloto tomó la decisión de seguirlos, aprovechando que unos auriculares que estaban en la mochila tenían el sistema de seguimiento de GPS activado. La famosa víctima de este robo llamó a la policía cuando se encontraba en las inmediaciones del lugar donde la señal había dejado de moverse pero, cuando llegaron los agentes, los auriculares aparecieron dentro de un jarrón, probablemente el lugar donde los cacos los dejaron al darse cuenta de que estos podían delatar su posición.