31 enero, 2020
PABLO LÓPEZ /
Tecnología y Edad Media parecen dos conceptos opuestos o, cuanto menos, poco relacionados; pero ambos irán de la mano en la próxima edición de Las Bodas de Isabel de Segura, una fiesta que, entre el 20 y el 23 de febrero, revivirá en las calles turolenses la tragedia de los Amantes de Teruel.
La federación que organiza estos festejos, que devuelven a Teruel a la Edad Media, y el propio Ayuntamiento han anunciado que cada una de las 150 jaimas ubicadas a lo largo del entramado urbano contarán con un pendón que identificará a la asociación a la que pertenecen y que, a través de un código QR, permitirá que cualquier vecino o visitante conozca todos sus detalles con la simple ayuda de su teléfono móvil.
“La parte que más trabajo nos ha costado es cómo integrar internet y las nuevas tecnologías con un espacio medieval, que en principio son tan incompatibles”, explica el presidente de la Federación de Asociaciones Las Bodas de Isabel de Segura, Fran Martín, que añade que la iniciativa responde a que existía “una falta de información general sobre los grupos, muchos de ellos con nombres extraños”.
La fiesta revive la historia de los Amantes de Teruel, la de una joven llamada Isabel de Segura que, tras haber esperado durante años el regreso del hombre al que amaba, que había salido de Teruel en busca de la fortuna que le permitiera contraer matrimonio, se casó con otro. La tragedia se produjo cuando, regresado el amante emigrado, Isabel le negó un beso por no defraudar a Dios y a su marido, algo que motivó que el hombre muriera tras un suspiro. Poco después, al besar el rostro del cadáver, también Isabel de Segura murió de amor. Ambos fueron enterrados juntos y todo aquel que visite Teruel puede contemplar su sepulcro, con esculturas yacentes de ambos cogidos de la mano.