16 abril, 2020
«Ya se puede hablar de 40.000 empresas del sector con serias dificultades de supervivencia tras la crisis». Esta es la tajante declaración con la que Hostelería de España alerta de que la crisis del coronavirus puede suponer mucho más que un parón temporal para uno de cada ocho establecimientos.
La entidad convierte así los datos de estudios como el elaborado por la auditoría Ernst & Young y la consultora Bain & Company, que vaticina que el sector perderá en España 150 millones euros diarios si el confinamiento se alarga durante 76 días como en Wuhan, y de sus propias encuestas para cuantificar los locales que bajarán la persiana para siempre.
Los hosteleros tratan con este dato de llamar la atención de un Gobierno de España al que reclaman medidas urgentes que salven un sector fundamental para la economía. Junto a la Asociación de Fabricantes y Distribuidores AEOC y la Federación Española de Industrias Alimenticias (FIAB), Hostelería de España ha remitido una carta al Ejecutivo en la que las tres entidades solicitan unos ERTE más flexibles, que permitan incorporar a los trabajadores de forma progresiva y que no les obliguen a mantener la totalidad de las plantillas durante seis meses.
«Necesitamos certidumbre, necesitamos previsiones, necesitamos datos y necesitamos conocer cuál va a ser el plan de flexibilización de los ERTE. Que quiten la coletilla del mantenimiento de empleo, que va a ser imposible. Ayúdennos a que los datos no sean tan graves», manifiesta el presidente de Hostelería de España, José Luis Yzuel.
La caída de los establecimientos hosteleros. que perderán el 40% de su facturación anual según las previsiones de los propios empresarios del sector en España, arrastrará a otros negocios, como los vinculados a la distribución y a la producción de alimentos y bebidas.
«Muchas empresas de la alimentación y bebida tienen entre el 80% y el 100% de sus ventas en el canal de la hostelería, que es fundamental para la Marca España, para los turistas que nos visitan y para toda la economía». expone el director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo.
Desde los proveedores y distribuidores, el director general de AEOC demanda medidas encaminadas «a aportar liquidez y flexibilidad». «La hostelería es un sector especialmente frágil ante esta crisis, pero también tiene las capacidades para remontar» apunta José María Bonmatí.