14 agosto, 2020
Había temor a que Alemania ampliara el número de comunidades autónomas españolas marcadas como peligrosas por el coronavirus, pero la noticia llegada esta tarde de ese país es incluso peor de lo esperado. El Gobierno germano ha asestado el que puede ser un golpe definitivo para el sector turístico y ha anunciado que pasa a considerar como zona de riesgo a toda España, con la única excepción de las islas Canarias. Hasta hoy (14 de agosto), formaban parte de esa lista negra Cataluña, Aragón, Navarra, Madrid y País Vasco.
La declaración implica que el Gobierno alemán desaconseja a sus ciudadanos viajar a España salvo casos de extrema necesidad y que todo viajero que llegue a Alemania procedente de algún punto de la geografía nacional, Canarias al margen, deberá someterse a un test PCR y, si es el caso, pasar una cuarentena.
La normativa alemana para frenar la llegada de casos de Covid-19 importados establece que todos los viajeros que lleguen al país procedente de países y regiones de riesgo deben presentar el resultado negativo de una prueba PCR realizada 48 antes de entrar en Alemania o bien someterse al test, una vez allí y dentro de las 72 horas posteriores.
Durante el tiempo de espera por los resultados, en el caso de que la prueba se realice en Alemania, los viajeros permanecerán en cuarentena domiciliaria. La multa para quienes eviten someterse al test puede llegar hasta los 25.000 euros.
Ahora, toda la España peninsular, Baleares y, a tenor de lo expuesto por el Gobierno alemán, también las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, forman parte de una lista de más de 130 regiones de todo el mundo marcadas como peligrosas.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania, Maria Adebahr, había expresado, en respuesta a la pregunta de un periodista sobre la situación en Baleares, la preocupación del Gobierno germano ante la situación epidémica que atraviesa España. Ni siquiera los más pesimistas pensaron que las restricciones podrían ampliarse de semejante manera.
Alemania siempre ocupa un lugar en el podio de los tres principales países emisores de turistas hacia España, en el que suele estar en segunda posición, por detrás de Reino Unido y por delante de Francia. La última decisión del Gobierno alemán puede suponer la puntilla para algunos destinos, especialmente los de sol y playa, que ya estaban heridos de muerte tras la cuarentena impuesta en Reino Unido a todos los viajeros procedentes de territorio español.