13 enero, 2023
Viajar a la vez que se ayuda a una comunidad o se protege la biodiversidad del planeta es posible gracias a un nuevo formato turístico emergente: el turismo de voluntariado, en el que la juventud española destaca por su gran compromiso, según un análisis realizado por la agencia de viajes online eDreams.
Según la encuesta realizada por la agencia, el 23 % de los españoles asegura que ha organizado uno o más viajes de voluntariado a lo largo de su vida, y un 51 % afirma que se plantearía hacerlo en el futuro. La tendencia es especialmente popular entre los jóvenes entre 25 y 34 años (28 %), tanto en los grupos de hombres como de mujeres, que reconocen haber realizado uno o más viajes de
voluntariado y desean repetir la experiencia.
Asimismo, el 41 % de los jóvenes comprendidos en esa franja de edad reconoce que se siente más dispuesto a hacerlo ahora que antes de la pandemia. Los dos últimos años, marcados por la crisis sanitaria, el conflicto bélico en Ucrania y la incertidumbre económica; han despertado la conciencia de muchos viajeros.
Según el estudio, el principal motivo por el que los españoles realizan este tipo de viajes es ayudar a las personas que lo necesitan (66 %), seguido de conocer una realidad y cultura diferentes (56 %), sentirse realizados (45 %) o desarrollar nuevas habilidades y aumentar la experiencia profesional (39 %).
Por otra parte, los turistas nacionales afirman que sus preferencias a la hora de realizar un voluntariado giran en torno al cuidado de los animales, el apoyo a la infancia en situación vulnerable y la protección de la naturaleza (44 %). Además, también reconocen hacerlo para contribuir en la educación de la comunidad (43 %), colaborar con las poblaciones locales (42 %) o prestar ayuda sanitaria (28 %).
Según la encuesta realizada por la agencia, el 23 % de los españoles asegura que ha organizado uno o más viajes de voluntariado a lo largo de su vida
Además de los españoles, los viajeros europeos también muestran una mayor predisposición a participar en el turismo de voluntariado tras la pandemia del coronavirus, cosechando cifras similares a las de España, pero con un mayor interés en el cuidado de la naturaleza, seguido de la ayuda a las poblaciones locales y la protección de los animales.