8 julio, 2021
“Mejor ir de vacaciones por Francia o a otro país que a Portugal y España”. Son palabras del secretario de Asuntos Europeos de Francia, Clément Beaune, hombre de máxima confianza del presidente Emmanuel Macron que, en declaraciones al canal France 2, acusa a ambos países de “haber abierto demasiado el grifo”.
La explosión de contagios motivada por los viajes de jóvenes a Baleares, el repunte de casos en comunidades autónomas como Cantabria y Cataluña y el aumento de ingresos hospitalarios en las principales ciudades de Portugal han llevado a Beaune a pronunciar unas palabras que suponen un severo varapalo al turismo y que empiezan a dejar entre los hoteleros y demás profesionales con una sensación de déjà vu con respecto a lo que ocurrió el pasado año.
La preocupación del Gobierno francés no radica únicamente en el incremento en el número de casos, sino también en el temor que genera la variante Delta (también llamada variante india), que se está haciendo fuerte en prácticamente todo el continente europeo.
“Los que todavía no hayáis reservado las vacaciones, evitad España y Portugal. La variante Delta está por todas partes. Seguimos particularmente la situación de Cataluña y Portugal, donde su expansión es muy rápida”, advirtió el secretario de Asuntos Europeos francés.
Por el momento, las declaraciones de Beaune se quedan en simples recomendaciones pero es más que probable que pronto se traduzcan en medidas concretas, ya que el presidente francés ha convocado una reunión del Consejo de Defensa Sanitario para abordar lo que muchos consideran ya como una quinta ola.
La situación del turismo será uno de los temas que el ministro de Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, abordará durante la reunión que mantendrá mañana con su homóloga española, Arancha González Laya.
Alemania y Bélgica han marcado como potencialmente peligrosas a varias comunidades autónomas españolas, a las que los gobiernos de ambos países desaconsejan viajar debido al repunte de contagios y al temor a la expansión de la variante Delta.
Bélgica ha puesto en el punto de mira a Cataluña, Aragón y Valencia. El Gobierno belga las ha incluido en su lista de territorios calificados como zona roja, por lo que aconseja a sus ciudadanos que no viajen a ellas salvo que sea expresamente necesario. Los que, pese a todo, decidan desplazarse a esos territorios deberán someterse a medidas especiales, que incluyen la realización de pruebas y la obligatoriedad de cuarentenas.
Alemania, que siempre se sitúa en el top 3 de países emisores de turistas hacia España, ha marcado como zonas de riesgo a Cantabria y Cataluña. La decisión, aunque puede hacer que algunos viajeros opten por otros destinos, no tiene consecuencias tan graves como la de Bélgica, pues los alemanes que viajaran a España ya tenían que someterse a una PCR y el pasaporte sanitario servirá incluso para desplazarse a esas zonas de riesgo. Alemania cuenta, además, con otras dos calificaciones más restrictivas que esa para evaluar la situación en países y regiones.