4 diciembre, 2020
La industria de cruceros confía en retomar su actividad en 2021 y superar el largo parón provocado por la crisis de la Covid-19 con la aplicación de los protocolos sanitarios que han sido diseñados por expertos. Esta fue una de las principales conclusiones del International Cruise Summit, el gran evento de la industria de cruceros, que concluyó este jueves en Madrid.
Aunque las navieras esperan poder reanudar sus viajes, los directivos concluyeron en el International Cruise Summit que la normalidad no se recuperará hasta 2022, cuando todos los barcos estarán operando. Además, creen que se potenciarán rutas desde puertos de embarque accesibles en coche, ya que, al menos inicialmente, habrá menos disponibilidad de vuelos y muchos pasajeros evitarán volar.
Con el objetivo de garantizar el distanciamiento social, el aforo se reducirá al 60% en los cruceros. Además, todos los pasajeros tendrán que someterse al test Covid-19 en la terminal de embarque, al igual que los tripulantes, que, además, harán cuarentena una vez a bordo antes de comenzar a trabajar. Entre las medidas de seguridad también destacan otras, como el uso de mascarillas donde no sea posible mantener la distancia, ventilación con aire fresco o filtrado y protocolos de aislamiento para casos sospechosos.
Otro de los puntos que se abordó durante el gran evento de la industria de cruceros fue la necesidad de que los turoperadores que se encargan de las excursiones en tierra también implementen políticas agresivas de prevención de contagios.
El sector se encontraba en pleno auge en 2019 y esperaba un año récord. que finalmente se ha convertido en una crisis sin precedentes. Tanto los gobiernos europeos como EUUU prohibieron su actividad desde la pasada primavera y solo los de Italia, Alemania y Grecia han levantado las prohibiciones. Por el momento, en España solo se ha autorizado la operativa de una naviera en Canarias, pero Barcelona sigue sin cruceros.