6 noviembre, 2020
Comprenden las medidas excepcionales que ha adoptado la Xunta de Galicia para afrontar la segunda ola de la pandemia y mantienen la fe en que el período de máximas restricciones sirva para “salvar la campaña de Navidad”. Los organizadores de congresos gallegos asumen con resignación un nuevo parón en su actividad, pero reclaman ayudas para poder soportarlo y unos criterios más cabales a la hora de poner limitaciones a los eventos.
Entre las principales quejas que OPC Galicia recoge en el comunicado que remitió para analizar el estado del sector MICE en la comunidad autónoma está la relativa a la limitación de aforos. Los organizadores de eventos consideran que ésta debe establecerse en función de las dimensiones y de la capacidad de cada recinto y no de forma genérica para todos los congresos.
“No parece razonable que un recinto con cientos de personas de aforo real y otro que sólo puede albergar a unas decenas tengan las mismas limitaciones. Sería más lógico establecer la norma tomando la capacidad total o los metros cuadrados de superficie”, comentan desde la asociación.
OPC Galicia dice estar todavía “a la expectativa” de comprobar cómo se materializan las ayudas que la Xunta prometió a las empresas para paliar el golpe económico que suponen las nuevas restricciones.
“La asociación comprende que las medidas del Gobierno autonómico son inevitables, siempre que tengan como resultado final el objetivo para el que fueron planteadas: salvar de alguna forma la campaña de Navidad y que empresas como las hosteleras o los hoteles puedan funcionar en ese período y que en 2021 se pueda retomar la actividad en el sector de reuniones y congresos”, apuntan desde OPC Galicia.
Los organizadores profesionales de congresos aprovechan su comunicado para reivindicar el buen hacer de sus empresas a la hora de cumplir con todas las medidas y protocolos. “El sector MICE ha sido el primero en aplicar todas las normativas y controles de seguridad, consciente de que no se puede permitir ni una sospecha de brote que ponga en tela de juicio tanto su credibilidad como la de los propios clientes”, manifiestan.