16 septiembre, 2020
La caída del turismo se ha medido en términos de pernoctaciones hoteleras, de pasajeros en los medios de transporte o de volumen de negocio en las agencias. Ahora, un estudio de la consultora inmobiliaria CBRE demuestra cómo los efectos del coronavirus sobre el sector se dejan notar también de una forma clara en la cifra de transeúntes que registran las calles de las ciudades con mayor afluencia de visitantes y, concretamente, la Rambla Catalunya de Barcelona.
Los datos son reveladores. El número de peatones que transitaron por la vía de la capital catalana en agosto cayó hasta un 61% con respecto al mismo mes del pasado año, un descenso motivado, principalmente, por el descenso en el número de turistas llegados a Barcelona.
Mediante una herramienta digital basada en la tecnología del análisis Big Data, la consultora autora del estudio ha demostrado, no sólo el descenso del número de peatones, sino también los cambios en cuanto a la procedencia de los mismos.
El coronavirus ha provocado una sobrerrepresentación del turismo de proximidad. Una prueba de ello es que los franceses constituyen casi el 50% de los extranjeros que pisaron Rambla Catalunya el mes pasado. En 2019, apenas suponían el 25%.
También se nota la tendencia al analizar las cifras de los visitantes españoles, de los que hasta un 53% tienen su residencia habitual en otra provincia de Cataluña. El año pasado, el peso de estos sólo era de un 16%.