1 septiembre, 2020
Un estudio realizado por la Federación Española de Campings (FEEC) revela que la ocupación media durante los meses de julio y agosto fue del 65%. “Hemos salvado los meses de verano y hemos permitido que cientos de miles de familias hayan podido disfrutar de unos días de descanso proporcionándoles la seguridad necesaria en un momento tan delicado como el que nos encontramos”, indica la presidenta de la FEEC, Ana Beriain.
A pesar de estas cifras, las previsiones de reservas para la temporada de otoño e invierno son mínimas, teniendo en cuenta la escasa presencia de turistas extranjeros y los llamamientos de los Gobiernos europeos para que sus ciudadanos no visiten España. Por esta razón, la FEEC incide en la necesidad de que los ERTES se prolonguen hasta fin de año “para evitar el cierre definitivo de muchos campings”.
El estudio también refleja novedades en esta temporada con respecto a las anteriores. Por ejemplo, que miles de autocaravanistas descubrieron los campings como forma de alojarse o que el bungalow fue el producto estrella del verano. Además, el 40% de las reservas se registraron la misma semana del viaje y un 20% de ellas en las 48 horas previas.
Los dos factores que han condicionado los datos de ocupación han sido los rebrotes y la falta de turistas extranjeros, lo que se ha traducido en una ocupación mayor en los establecimientos de la cornisa cantábrica y en el interior y unos datos más flojos en los establecimientos de la costa mediterránea, más dependientes del cliente extranjero.