22 mayo, 2020
La decisión del Ministerio de Sanidad de decretar una cuarentena de 14 días para todo aquel que llegue procedente del extranjero sigue pasando factura al sector turístico. El último golpe llega desde Reino Unido, que ha dejado a España fuera de la lista de países con los que ha iniciado negociaciones con vistas a establecer un corredor sanitario para el transporte aéreo.
Portugal, Grecia, Nueva Zelanda y Australia son los cuatro países con los que el Gobierno británico pretende alcanzar un acuerdo para que los turistas puedan llegar sin necesidad de pasar un período de confinamiento. España no forma parte de estas negociaciones, algo que resulta preocupante para el sector, al ser el mercado británico el que más turistas le reporta.
En total, el pasado año, llegaron a España más de 18 millones de británicos. La cifra, pese a suponer una caída del 2,4% con respecto a 2018 y pese a los problemas derivados del Brexit o de la quiebra de Thomas Cook, mantuvo a Reino Unido como principal país de origen de los visitantes extranjeros.
Las agencias de viajes lo tienen claro: la exclusión de España no es casual y constituye una respuesta a la cuarentena impuesta a los visitantes extranjeros por Sanidad. “Es una mala noticia y parece que responde a la mala imagen que España está transmitiendo con el anuncio de las cuarentenas”, lamenta el presidente de la Confederación de Agencias de Viajes (CEAV), Carlos Garrido.
El máximo representante de CEAV, al igual que los de otras organizaciones vinculadas a las agencias de viajes, ya había advertido acerca de las consecuencias negativas de la cuarentena después de que Francia estableciera la misma medida para los viajeros españoles. Ahora, para evitar que España quede fuera del reparto veraniego de destinos, exige al Gobierno que deje de poner trabas al turismo internacional.
“Es necesario dar un mensaje claro al exterior, así como una planificación de las aperturas, para que las agencias podamos empezar a programar y comercializar viajes y para que el turismo se restablezca”, expone.
Los cuatro países con los que el Gobierno británico negocia los corredores sanitarios registran unos datos de contagios y muertes por coronavirus más bajos que España, pero Reino Unido es el país con mayor número de fallecidos de toda Europa y el segundo a nivel mundial, con más de 36.000 decesos registrados por Covid-19.