2 julio, 2020
Guantes, mascarillas y geles hidroalcohólicos protegen frente al coronavirus, pero pueden suponer un peligro medioambiental para los parajes por los que discurre el Camino de Santiago. La organización ambiental Ecoembes, que un año más pone en marcha su iniciativa Camino del Reciclaje, solicita a los peregrinos que recorran la ruta jacobea en estos tiempos de pandemia que tengan especial cuidado a la hora de deshacerse de esos “nuevos compañeros de viaje”.
“Hacemos un llamamiento para que los peregrinos no abandonen sus residuos en la naturaleza, especialmente los guantes, las mascarillas y los envases de gel, ya que fruto de la emergencia sanitaria provocada por la Covid-19, se ha generado la necesidad de utilizar nuevos productos para proteger la salud personal y la de terceras personas”, exponen los responsables de Camino del Reciclaje.
Los impulsores de la iniciativa medioambiental celebran el regreso de la actividad al Camino de Santiago y mencionan la reciente apertura de la Catedral de Santiago, la de la Oficina del Peregrino y la de muchos de los albergues. La responsable del proyecto, Carolina Martín, recuerda a los peregrinos que inicien alguna de las rutas que conducen a Compostela que la llamada nueva normalidad implica también nuevas responsabilidades.
“Estamos seguros de que la mayoría de ellos cumplirán con las recomendaciones de las autoridades frente a la Covid-19 y que depositarán los guantes y mascarillas en el contenedor correspondiente en vez de abandonarlos en los preciosos senderos de este marco natural incomparable que es el Camino de Santiago, ya que podrían convertirse en una nueva tipología de basuraleza, con el consiguiente impacto para la ruta”, comenta Martín.
Para difundir el mensaje en redes sociales, Ecoembes y el proyecto Libera de SEO Birdlife han creado el hashtag #NoAbandonesTusGuantesYMascarillas. El objetivo: que los elementos de defensa frente al coronavirus acaben en el contenedor de resto (el gris) en lugar de ser depositados en otro diferente o en la propia naturaleza.
El proyecto Camino del Reciclaje cuenta con la colaboración de 450 alberges de cinco comunidades autónomas (Galicia, Cantabria, La Rioja, Castilla y León y Asturias). Todos ellos están equipados con contenedores para que los peregrinos puedan depositar sus residuos de forma que se facilite su posterior reciclaje.