13 noviembre, 2020
La decisión del Gobierno de obligar a los viajeros internacionales de más de 60 países a presentar una prueba PCR con resultado negativo para poder viajar a España ha tenido numerosos defensores dentro del sector turístico y de las autoridades de las comunidades autónomas, aunque también han surgido voces críticas como la de la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur), que teme que la medida ejerza un efecto “disuasorio”.
Las primeras críticas llegaron de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cerhat) que, si bien reclamó desde un principio la realización de pruebas para detectar el coronavirus, considera que existen test más económicos y menos molestos que las PCR. A las declaraciones de la patronal hotelera siguieron las pronunciadas por el vicepresidente de Exceltur, José Luiz Zoreda, que está a favor de que se controle a quienes llegan, pero que considera que el método debe conjugar seguridad y facilidad.
Zoreda solicita unas medidas “suficientementre flexibles” que permitan que el turista que programa su viaje opte por España y no por otros destinos en los que las exigencias sean menores.
Exceltur refuerza así el mensaje emitido por Cehat, que también insistió en que hay fórmulas más adecuadas que las PCR para determinar que los viajeros que llegan a España están libres de la Covid-19. “La propuesta del Gobierno llega tarde y resultaría muy costosa a los viajeros y poco operativa a la vista de los avances que existen ya en pruebas de detección de Covid-19”, expuso la patronal hotelera.