22 enero, 2021
Uno de cada cuatro turistas europeos menciona la masificación como uno de los factores que más insatisfechos los dejan cuando vienen a España. Así lo concluye el Estudio de Posicionamiento de España como Destino Turístico elaborado por el Instituto Elcano y Turespaña que, mediante 17.300 entrevistas realizadas en 33 países, ofrece un completo mapa del modo en que los turistas internacionales perciben al país.
Pese a ese problema detectado por el 24% de los turistas europeos, la satisfacción de quienes han estado en España es alta, pues la nota de valoración está por encima de 8, en una escala de 0 a 10, tanto para los viajeros continentales como para los Asia y América.
Los turistas de largo radio, los que proceden de Asia y América, muestran un mayor interés por la cultura española (un 31% la mencionan como principal atractivo), algo que los autores del informe atribuyen a la necesidad de invertir más tiempo y dinero en el viaje. El sol y playa no bastan para estos turistas de larga distancia, que buscan algo más y que encuentran en la historia y en la tradición españolas un elemento positivo. Quizás sea por eso por lo que valoran a España por encima del conjunto de destinos (8,8 frente a 8,6).
Para el turismo europeo que llega a España, dominado por el deseo de sol y playa (principal atractivo para el 34%), la satisfacción es también alta, aunque menor que la de los viajeros de otros continentes. Los europeos otorgan a España una valoración de 8,1 puntos, ligeramente por debajo del 8,3 que conceden al conjunto de los destinos.
El precio es una ventaja competitiva para España. Lo acredita el hecho de que sólo un 13% de los encuestados en el estudio del Instituto Elcano y Turespaña lo considere un motivo de insatisfacción. El porcentaje de insatisfechos con el dinero gastado sube hasta el 19% si se pregunta por el último viaje realizado a cualquier destino.
Parte del dinero gastado por los turistas internacionales que visitan España está dedicado a ir de compras, al menos para uno de cada cuatro encuestados. Un 68% realizaron compras de artículos de moda y un 43% invirtieron en productos gastronómicos.