28 octubre, 2020
“¡No al cierre!” y “No al toque de queda!”. Estas son algunas de las frases que se han podido escuchar esta mañana en distintas ciudades españolas, donde los hosteleros se han concentrado en protesta contra las nuevas restricciones fruto del estado de alarma. La situación es especialmente delicada en Cataluña y La Rioja, donde, directamente, los bares y restaurantes han tenido que cerrar sus puertas siguiendo las normas aprobadas por sus gobiernos regionales.
El principal argumento de los hosteleros españoles para denunciar las medidas adoptadas es que, según los datos del Ministerio de Sanidad del 22 de octubre, solo un 2,1% de los casos se producen en los locales de ocio, lo que supone un 4,7% de los casos activos.
“El sector defiende que la salud es la máxima prioridad, pero la economía también es necesaria para garantizar la vida, por lo que urge tomar decisiones en esta materia”, explicaban los representantes de la Asociación Hostelería Compostela durante la concentración que se ha celebrado en la plaza del Obradoiro, en la capital gallega.
En Gijón, los representantes del sector hostelero también se concentraron esta mañana en las calles para protestar por el cierre. Esto ocurrió a pesar de que la manifestación quedó desautorizada, con menos de 24 horas de antelación, por la Delegación del Gobierno, que limitó el número de personas que podían asistir al encuentro. Y es que Asturias es una de las cinco comunidades españolas que se han cerrado al resto de España ante el incremento del número de contagios. La misma decisión se ha adoptado en País Vasco, La Rioja, Navarra y Aragón.
La plaça de Sant Jaume de Barcelona también ha sido testigo de la desesperación de un sector que ha tenido que cerrar sus puertas y que, además, han tenido que adaptar el servicio a domicilio al toque de queda, que el Govern ha establecido a las 22:00 horas.